La exsecretaria de Estado Hillary Clinton, quien se presenta como la abanderada de las mujeres para llegar a la Casa Blanca, no logra en este inicio de campaña mostrar capacidad para seducir a este electorado clave.

En la primaria demócrata realizada el martes en New Hampshire, las mujeres en todos los segmentos de edad optaron por el veterano senador Bernie Sanders, de 74 años, que venció con enorme margen.

Estas mujeres claramente no están convencidas de que solamente otra mujer puede defenderlas, como ciertos apoyos a Clinton se encargan de repetir.

En New Hampshire, en general el 55% de las mujeres apoyaron a Sanders, contra 44% por Clinton.

Pero cuando se analiza por edades, los sondeos muestran que entre las mujeres con menos de 30 años el apoyo a Sanders alcanzó el 82%, al tiempo que entre las mujeres menores de 45 años ese nivel de apoyo alcanzó el 69%.

Para Geoffrey Skelley, de Centro para Política de la Universidad de Virginia, en New Hampshire Clinton tuvo “un mejor desempeño entre las mujeres que entre los hombres”, porque si la caída del apoyo femenino fue de 11 puntos porcentuales entre los hombres fue de 35 puntos porcentuales.

Por lo tanto, “ella aún tiene capacidad de obtener un enorme apoyo entre las mujeres” en lo que resta de la campaña a la Casa Blanca, añadió.

De acuerdo con un sondeo realizado por la universidad Quinniepiac, del 2 al 4 de febrero, 48% de las mujeres estadounidenses votarían por ella y el 38% por Sanders, con un 12% que se declaran indecisas.

En la opinión de Debbie Walsh, directora del Centro para las Mujeres y la Política, el mal desempeño de Clinton en New Hampshire es sobre todo reflejo de la fuerte atracción que Sanders ejerce sobre los jóvenes apoyado en un mensaje “muy idealista”, al tiempo que Clinton usa un discurso “pragmático”.

Las seguidoras de Clinton, en tanto, afirman que solamente una mujer podrá representar debidamente a las otras mujeres en el ámbito de la política.

La célebre feminista estadounidense Gloria Steinem presentó el domingo sus disculpas por haber sugerido en un programa de televisión que “las mujeres jóvenes no son serias con sus visión política”, y que votaría por Sanders porque “los muchachos” están del lado del senador.

“Vistos como idiotas”

A su vez, la ex secretaria de Estado Madeleine Albright generó reacciones indignadas por haber afirmado que existe “un lugar especial en el Infierno reservado a las mujeres que no ayudan a otras mujeres”.

En respuesta, el columnista Frank Bruni, del New York Times y públicamente gay, se preguntó que habría también un “lugar en el infierno” para él en caso de que no apoye un candidato abiertamente gay.

“Hay una extraña tendencia de pensamiento rondando alrededor de la campaña de Clinton: de que debemos votar por ella porque es mujer. O que está inoculada de ciertos defectos o acusaciones por una cuestión de género”, escribió Bruni.

En cualquier caso, lo cierto es que Clinton es ahora la única mujer que sigue en la carrera presidencial, después que la republicana Carly Fiorina arrojara la toalla el miércoles.

Para Skelley, “a los electores no les gusta ser vistos como idiotas que votarán por cualquiera solamente porque es de la misma raza o del mismo sexo”.

“Aunque hay razones para pensar que mujeres respalden a Clinton porque es una mujer candidata, eso en sí mismo no es suficiente para atraer votos”, añadió.

Clinton trató de defender el domingo a Albright durante una entrevista de TV, al afirmar que es necesario “recordar a las mujeres jóvenes que (…) esta lucha en la que participamos no está terminada”.

En opinión de Walsh, sin embargo, tener una mujer al frente de la Casa Blanca “no es tan histórico” como para la generación anterior.