La posibilidad de extraditar a Galvarino Apablaza tomó fuerza los últimos días luego que la justicia argentina determinara que el ex líder del Frente Patriótico Manuel Rodríguez y principal imputado en el crimen del senador Jaime Guzmán no cumple con los requisitos para tener la categoría de refugiado.

Así se desprende luego que el 3 de febrero pasado el Juzgado Contencioso Administrativo Federal 1 de Argentina resolviera que la ley local no permite entregar esa calidad a un acusado de delitos comunes.

Recordemos que en el 2010 la Corte Suprema trasandina había autorizado la extradición de Apablaza, decisión que fue congelada luego que la Comisión Nacional para Refugiados (Conare) le dio la categoría de asilado político.

El Estado Chileno intentó dejar nula dicha decisión pero el ex frentista y el gobierno de Cristina Fernández impugnaron dicha demanda argumentando que Chile no tenía las facultades para objetar la resolución de la Conare.

No obstante, el último fallo judicial trasandino establece que Apablaza es acusado de delitos comunes por lo que no puede obtener la categoría de refugiado y Chile puede solicitar su extradición.

El senador UDI, Juan Antonio Coloma, calificó como una muy buena señal la decisión de los tribunales de justicia trasandinos que permitirá ir aclarando el crimen de Jaime Guzman.

Por su parte el vicepresidente gremialista, Edmundo Eluchans, valoró las gestiones realizadas por el Gobierno de Bachelet para lograr este avance.

En tanto, el diputado UDI Sergio Gahona valoró que el nuevo gobierno trasandino haya puesto las cosas en su lugar para avanzar en la extradición del ex frentista.

No obstante y más allá de las aspiraciones de la UDI, hay que recordar que el sistema procesal argentino aún entrega herramientas a la defensa de Galvarino Apablaza para evitar su comparecencia ante la justicia chilena.