La ministra en visita de la Corte de Apelaciones de Concepción Carola Rivas, que dirige la indagatoria por la desaparición y muerte de Jorge Matute Johns, interrogó al dueño de la ex discoteque La Cucaracha, Bruno Betanzo, y a los guardias de las instalaciones donde fue el universitario fue visto con vida por última vez el 20 de noviembre de 1999.

Las diligencias, que se enmarca entre muchas otras que ha efectuado la ministra desde que asumió la investigación en julio de 2014, se realizaron en las últimas semanas bajo la más completa reserva en el tribunal de alzada penquista, según conoció de manera oficial Radio Bío Bío.

Consultado por La Radio, Bruno Betanzo declinó confirmar o desmentir el antecedente.

Además de Betanzo, la ministra Rivas interrogó a todas las personas que trabajaban en La Cucaracha en ese entonces. Entre ellos se encuentra la pareja del dueño de las demolidas instalaciones, Carmen Sereño, y también los guardias.

Estos últimos, en las etapas tempranas de la indagatoria, fueron inculpados en la causa que en ese momento instruía la entonces jueza Flora Sepúlveda. En esa misma calidad habrían sido interrogadas todas estas personas, enmarcado en la línea investigativa de determinar si quienes estaban a cargo de la discoteca intervinieron y podrían ser responsables de lo que le ocurrió a Jorge Matute tras desaparecer en la madrugada del 20 de noviembre, y cuyos restos fueron encontrados en 2004.

La magistrada está desempeñándose en la Segunda Sala del tribunal de alzada, pero también continúa con el trabajo como ministra en visita del caso Matute sin dedicación exclusiva, calidad en la que laboró el año pasado.

Esta situación podría cambiar dependiendo de los avances que se conozcan de las diligencias que, antes de salir de vacaciones, Rivas encargó al equipo de la Policía de Investigaciones con el que trabaja desde que ella asumió la indagatoria.