Comerciantes de la ciudad de Los Ángeles denunciaron a los vendedores ambulantes de proveer chalecos reflectantes no certificados y a un precio mayor que los locatarios establecidos. Mientras, desde la Cámara del Comercio de la comuna acusaron a las autoridades de no fiscalizar este tipo de venta.

Tras la nueva normativa que obliga a los conductores a portar un chaleco reflectante en sus vehículos, cientos de comerciantes han aprovechado esta oportunidad para vender este implemento, lo que se ha convertido en un “negocio redondo” para ellos.

Pero los locatarios establecidos que cuentan con permiso para vender en la ciudad han denunciado a los comerciantes ambulantes de proveer los chalecos a un precio bastante elevado y, más aún, sin la certificación de la Ley de Tránsito.

Así lo señaló Alexis, un locatario del centro de la ciudad, quien reconoció que en enero los comerciantes ambulantes vendieron los chalecos reflectantes a un precio que superó los ocho mil pesos, mientras que los locales establecidos lo hicieron a cinco mil pesos.

Desde la Cámara del Comercio de Los Ángeles, su presidente, Walter Aránguiz, compartió las palabras del locatario y denunció esta actividad de forma desleal e ilegal.

Además, Aránguiz acusó que las autoridades no fiscalizan este tipo de venta, lo que perjudica a los vendedores establecidos.

En la actualidad, los chalecos reflectantes no se encuentran agotados, y el valor de este implemento va desde los dos mil hasta los cinco mil pesos en los locales permitidos.