El miércoles, la Comisión Constitución del Senado, aprobó 33 de las 120 indicaciones de la agenda corta antidelincuencia, que busca mejorar las herramientas para la persecución de delitos.
Dentro de las indicaciones más polémicas se encuentran la otorgación de mayores facultades a los policías para que puedan interferir en posibles delitos.
Desde el Instituto Nacional de Derechos Humanos, su directora, Lorena Fries, indicó que esta medida es regresiva y peligrosa, y que no ayuda a la disminución de la delincuencia.
Por su parte, el abogado penalista, Mauricio Daza, calificó la medida de “populismo penal”, indicando que lo que busca es demostrar a la ciudadanía que se está haciendo algo por la delincuencia, pero no soluciona el problema.
Sin embargo, el director de la Fundación Ciudadano Seguro, David Rozowski, afirma que esta iniciativa ayudará a dejar tras las cárceles a los delincuentes.
El Senador de la Comisión Constitución, Alberto Espina, indicó que la detención queda al criterio de los policías. Además consideró que esta iniciativa es aceptada por la mayoría de la gente.
La modificación al artículo 85 del Código Procesal Penal indica que los funcionarios policiales podrán controlar la identidad de cualquier persona en cualquier lugar en que esta se encuentre.
Entre otras indicaciones que fueron aprobadas se encuentran la obligación de los policías de tomar declarciones a testigos al momento de realizar la denuncia y la prohibición a los jueces de rebajar penas por robo.
