El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, reconoció que “hubo un error de navegación” de los dos barcos estadounidenses, dijo en una rueda de prensa en la sede del comando de las fuerzas estadounidenses en el Medio Oriente (Centcom), en Tampa en el estado de Florida.

Los 10 miembros de la tripulación, que estuvieron retenidos durante menos de 24 horas por los iraníes, “estaban claramente fuera de la posición en la que querían estar” cuando fueron interceptados, afirmó Carter.

Las dos pequeñas embarcaciones (18 metros) ligeramente armadas, fueron detenidas el martes después de entrar en aguas territoriales iraníes alrededor de la isla de Farsi en el Golfo Persa.

Según el Pentágono, estaban en tránsito entre Kuwait y Bahréin.

Tanto Irán como Estados Unidos han evitado la escalada en este asunto,
que ocurre a pocos días de la fecha prevista para que entre en vigor el histórico acuerdo nuclear.

El jefe del Pentágono mantuvo un tono conciliador en la jornada de ayer jueves, absteniéndose de pronunciarse sobre una posible violación por parte de Irán de las convenciones internacionales sobre el tratamiento de los prisioneros, tras la publicación por parte de medios iraníes de imágenes de marinos estadounidenses arrodillados en los barcos, con las manos en la cabeza.

“No conocemos el contexto completo” de estas imágenes, dijo el funcionario estadounidense. A su lado, el jefe de las fuerzas estadounidenses en el Medio Oriente, el general Lloyd Austin, explicó, un poco avergonzado, que los iraníes a primera vista no parecían haber incautado material en las naves.