Samsung Electronics anunció este martes haber alcanzado un “acuerdo final” con los representantes de los empleados que contrajeron el cáncer trabajando en sus fábricas de semiconductores, si bien algunas víctimas lo consideran insuficiente.

El gigante surcoreano de la electrónica cerró con dos asociaciones que representan a las víctimas y sus familias un acuerdo para mejorar las condiciones sanitarias y de seguridad en todas las fábricas.

Según los abogados de las víctimas, 224 trabajadores en las fábricas de producción de chips y pantallas destinadas a teléfonos y televisores desarrollaron enfermedades raras a causa de sus peligrosas condiciones de trabajo. Entre ellos, 87 murieron.

Durante años, Samsung rechazó cualquier vínculo con el cáncer de sus empleados, pero en 2014 el grupo presentó sus disculpas antes de poner en marcha un año después un fondo de indemnizaciones para las víctimas.

Las partes acordaron poner en marcha una comisión independiente encargada de “una inspección exhaustiva de las instalaciones de Samsung”, dijo el gigante surcoreano en un comunicado. Esta comisión deberá “publicar informes sobre todos los sectores susceptibles de mejoras”.

Banolim, una de las asociaciones de víctimas, estimó sin embargo que el asunto aún no estaba solucionado, en contra de lo que dijo un portavoz de la compañía a la AFP.

Las familias no han aprobado todavía por completo las disculpas presentadas por Samsung y los fondos de indemnización, dijo a la AFP Kwon Young-Eun, miembro de esta asociación.

Según Samsung, más de 100 personas de los 150 solicitantes recibieron ya compensaciones del fondo de indemnización.