Cuando escuchamos el concepto “cuerpo ideal” -que promueven algunas revistas femeninas y programas de dietas y/o ejercicio- imaginamos una silueta muy delgada y tonificada, digna de una pasarela de Victoria’s Secret. Aunque es válido trabajar por lograr ese tipo de anatomía, muchas mujeres que por genética (o cualquier otra razón) no pueden conseguir este ideal, se afligen y acomplejan pensando que si no cumplen con el canon están perdidas y su único destino es esconder su cuerpo.

Aburrida de que este ejemplo de “anatomía soñada” sea el único, la personal trainer Molly Galbraith -dueña del portal de fitness, Girls Gone Strong- decidió compartir una foto de sí misma usando un bikini en un balneario, con el que entregó un gran mensaje.

“Este es mi cuerpo. Esta no es una foto de antes. Esta no es una foto de después. Esto sólo pasa a ser una foto de cómo se ve mi cuerpo un martes cualquiera de diciembre de 2015 – es un cuadro de la vida”, comenzó su mensaje.

“Este es un cuerpo que adora las proteínas, vegetales, el queso y el helado. Este es un cuerpo que ama a hacer pesas, ejercicios de brazos, sentadillas, y dormir. Este es un cuerpo que ha abusado de la comida rápida, el trasnoche, y el estrés. Este es un cuerpo que (también) ha llegado al borde de la delgadez.”, comentó.

Luego, prosiguió: “Este es un cuerpo que ha sido llamado: demasiado gordo, demasiado delgado, demasiado masculino, demasiado fuerte, demasiado débil, demasiado grande, demasiado flaco… Todos en la misma semana”.

“Este cuerpo ha sido evaluado públicamente, juzgado y criticado, y esos juicios se han utilizado para determinar mi nivel de habilidad como entrenadora y mi valor como persona, tanto positiva como negativamente. Algunas personas dicen que ‘matarían por tener este cuerpo’ y otros dicen que ‘se matarían si tuviesen este cuerpo’, (sí, por desgracia, es una cosa que de verdad los humanos se dicen los unos a los otros)“, sentenció Molly.

La entrenadora finalizó su declaración indicando que gastó demasiado tiempo, energía y espacio mental para que su cuerpo se viera diferente, pero que hoy las cosas son distintas.

“Hoy se trata de un cuerpo que es amado, adorado, y acariciado por la única persona cuya opinión importa – yo. Este es el primer año en mucho tiempo que no he hecho ninguna resolución para cambiar la forma en que mi cuerpo se ve. Este es un tipo de libertad que no pensé que volvería a experimentar, y se siente muy, muy bien”.

Desde que fue publicada el 1 de enero, la foto de Galbraith ha recibido más de 114 mil “Me Gusta” y ha sido compartida más de 16.500 veces. En la ocasión, también comentó que fue diagnosticada con la enfermedad de Hashimoto (también conocida como tiroiditis crónica) y síndrome de ovario poliquístico, lo que influyó en sus cambios de peso.

A continuación revisa el mensaje y la foto de Molly.

This is my body. This not a before picture. This is not an after picture.This just happens to be what my body looks…

Posted by Molly Galbraith on viernes, 1 de enero de 2016