Un careo con la ministra de la Corte Suprema, Rosa Egnem, plantearon los familiares de las víctimas de la masacre de Laja San Rosendo en 1973, luego de declarar en la causa ante el juez Carlos Aldana.

Rosa Egnem era secretaria del Juzgado de Yumbel cuando fueron encontrados los restos de los trabajadores de la papelera y de Ferrocarriles ejecutados tras el golpe militar.

Los familiares de las víctimas cuestionan que la ministra de la Corte Suprema no investigara el hallazgo y sobre eso conversaron en una reunión sostenida en septiembre del año pasado en Santiago.

Justamente sobre ese encuentro trató la declaración de Gloria Urra, presidenta de la Agrupación de Familiares del caso Laja San Rosendo, y el vocero Emilio Araneda, ante el ministro Carlos Aldana, el miércoles pasado.

Según indicó Araneda, son evidentes las diferencias entre lo señalado por la ministra Egnem en su testimonio en el sumario, con las explicaciones dadas a los familiares.

De allí, sostuvo Araneda, hijo de uno de los ejecutados, que la ministra de la Suprema declare nuevamente, planteando incluso un careo.

Las diferencias tienen que ver con la responsabilidad que según los familiares atribuyó Rosa Egnem a la Corte de Apelaciones de Concepción de la época al haber rechazado los recursos de amparo en favor de los ejecutados, nada de lo cual expresó la magistrada en su testimonio al ministro Aldana.

La investigación del caso Laja San Rosendo está actualmente dirigida al rol de la ministra Egnem y el de ex ejecutivos de la CMPC en la violación de derechos humanos, aspectos que serán revisados este martes por el tribunal de alzada, dijo el abogado querellante Adolfo Montiel.

Hasta ahora hay una docena de ex miembros de Carabineros procesados por los crímenes, siendo rechazados en primera instancia los encausamientos de dos ex ejecutivos de la papelera de Laja, Roberto Izquierdo y Pedro Jarpa, pronunciamientos del ministro Aldana que serán revisados por la Corte penquista.