En la Unión Demócrata Independiente (UDI), reconocieron que 2015 ha sido un año complicado por los casos de financiamiento irregular de la política, sin embargo, aseguraron que han sido el único partido “que ha dado la cara”, y que desde ahí surgirá una propuesta de gobierno.

Un ex presidente del partido condenado, un senador que puede ser desaforado y congresistas formalizados por casos de financiamiento irregular de la política, es el escenario que ha enfrentado la UDI durante 2015.

En este contexto, el ex presidente de la colectividad, Ernesto Silva, quien tuvo que renunciar en medio de las indagaciones, reconoció que ha sido un año difícil para la política en general y en especial para la UDI.

A juicio del legislador, el gremialismo ha sido el único partido que ha dado la cara por estos temas, y que por eso lograrán recuperar la confianza de la ciudadanía y que surgirá de ellos una propuesta para gobernar.

Por su parte, el diputado Jaime Bellolio, quien suena para presidir la UDI una vez que la directiva del senador Hernán Larraín llegue a su fin el próximo año, afirmó que el partido tiene muchas tareas hacia el futuro, que deben actuar de manera distinta y ser capaces de sintonizar con la ciudadanía.

No obstante, el diputado insistió que nunca condenarán anticipadamente a nadie cuando sean cuestionados por la justicia, esto haciendo alusión a las críticas que han realizado algunos senadores de Renovación Nacional que pidieron que Chile Vamos condene con fuerza los hechos.

Al ser consultado sobre si le gustaría llevar adelante a él los cambios a la cabeza de la colectividad, no descartó la opción, y aseguró que están debatiendo sobre eso.

Según indicaron fuera de micrófono algunos militantes, Bellolio estaría dispuesto a ser el nuevo presidente bajo ciertas condiciones, entre ellas; que la colectividad deje de vivir de las glorias pasadas, que haya un desmarque con la dictadura militar de Augusto Pinochet y que se pueda mirar hacia el futuro.