En una feria libre de Valparaíso fueron vendidos los cascos de piloto robados a la Conaf desde el aeródromo de Rodelillo y fue el mismo comprador, un particular, quien finalmente los entregó a Carabineros.

La policía uniformada explicó que tras el robo que afectó a la unidad aérea de combate de incendios forestales, las diligencias habían sido infructuosas, hasta que un hombre llamó al nivel 133 para contar una particular historia.

El hombre había relatado que cuando recorría una feria libre le llamaron la atención los cascos de piloto y que los adquirió a bajo precio junto a dos extintores. Luego, al enterarse por la prensa del robo que afectó a Conaf, decidió devolver los elementos comprados.

Los cascos y los dos extintores fueron devueltos a Conaf mientras que Labocar de Carabineros continúa realizando las pericias para determinar a los autores del ilícito.