Brooke McCarter, uno de los actores de la cinta de vampiros Generación Perdida, falleció a la edad de 52 años producto de una enfermedad.

Según informó el portal de espectáculos TMZ, McCarter murió tras años de lucha contra una afección hepática genética.

Brooke McCarter interpretó al vampiro Paul, quien en la película murió quemado en una tina llena de agua bendita y ajo. Su actuación, junto a la de Kiefer Sutherland y Jason Patric, además de Corey Haim y Corey Feldman los posicionó como nuevas estrellas de Hollywood.

Si bien hubo intentos de retornar a mejores papeles, McCarter no tuvo mejor suerte y poco a poco fue quedando en el olvido, en una cinta emblemática de fines de los años 80.

Póster de la cinta de Warner Bros

Póster de la cinta de Warner Bros

La muerte de McCarter coincide con la de hace un año de otro del elenco, el vampiro jefe Max, que interpretaba el actor Edward Herrmann.