En los últimos días se registró una polémica en torno a la realización del partido entre Everton y La Serena, debido a un informe negativo entregado por Carabineros respecto de la seguridad al interior del Estadio Sausalito de Viña del Mar.

Finalmente, la Intendencia decidió autorizar el partido con varias medidas de seguridad extra, con el fin de evitar desmanes.

Sin embargo, la duda queda al pensar que el recinto de Avenida Padre Hurtado es nuevo, construido con estándares internacionales y en donde ya hubo problemas con los hinchas debido a las falencias de seguridad que tiene en su interior y que no han sido reparadas.

El gobernador de Valparaíso, Omar Jara, indicó que las reparaciones recomendadas por la sección OS-5 de Carabineros se debe efectuar a la brevedad para poder darle el uso que corresponde al estadio, en el que se invirtieron millones de dólares.

Mientras que el intendente Gabriel Aldoney fue tajante al momento de exigir que las reparaciones que corresponde se hagan a la brevedad.

La autoridad hizo un llamado a la Municipalidad de Viña del Mar para que realice los arreglos.

El principal problema que presenta el recinto tiene que ver con la altura de las rejas perimetrales que separan el campo de juego con las galerías.

Recordemos que durante el desarrollo de la final del Mundial Sub 17 y de uno de los partidos de Copa América, algunos hinchas saltaron aquella reja, dejando en evidencia los problemas existentes.