La destitución de José Mourinho motivó titulares ingeniosos y burlescos en la prensa británica de este viernes, que jugaban principalmente con el apodo del entrenador portugués, “the Special One” (“el especial”).

El diario The Daily Telegraph tituló en portada “No tan especial”, mientras The Independent hacía la lectura contraria: “Despedido de nuevo. Eso sí que es especial”.

El tabloide The Sun hablaba de “The Broken One”, “el roto”, o “el estropeado”.

No faltaron las metáforas navideñas, particularmente con el relleno del pavo, “stuffed”, que significa también “estar jodido”.

Ese fue el término, en mayúsculas, elegido para el titular en la última página de The Sun: “STUFFED”.

“‘Rellenan’ a José: almuerzo navideño como el equipo… y luego despedido por perder a un vestuario venenoso”, escribió The Daily Mirror.

Los columnistas lamentaron la pérdida de un entrenador con una personalidad tan fuerte, suministro constante de buenos titulares.

“Ha sido glorioso, divertido, ruidoso, venenoso e interminable”, escribió Barney Ronay, el columnista de The Guardian, en un artículo titulado “Entonces, adiós, José Mourinho”.

The Daily Mail destacó que el portugués “va a estar riendo durante todo el camino al banco”, en alusión a la indemnización, a la que pone cifras en un titular: “Un hombre con ínfulas de Dios se va con 10 millones de libras” (15 millones de dólares, 13,8 de euros).

La noticia dominó las portadas. Hasta el primer ministro británico, David Cameron, reaccionó a la destitución, a través de un portavoz: Cameron “está siempre triste cuando alguien pierde su trabajo, pero vale la pena recordar las estadísticas laborales publicadas esta semana, que muestran que hay 740.000 vacantes en la economía británica”.

El diario financiero Financial Times tomó la inusual decisión de ocuparse de la noticia en portada, con el titular “Tarjeta roja del Chelsea a Mourinho después de que el máximo ganador adquiriera el hábito de perder”.

Los análisis incidieron en la mala relación de Mourinho con sus jugadores y el papel del propietario del Chelsea, el multimillonario ruso Roman Abramovich.

“Lo intentó todo para mantener el culto a José en estos meses de creciente malestar, pero algunos jugadores clave estaban hartos de él, de su voz, de su método, de sus exigencias”, escribió Matt Dickinson, columnista deportivo de The Times.

Paul Hayward, periodista deportivo del Telegraph, lanzó un aviso al sustituto de Mourinho en el Chelsea.

“La postura tradicional de Abramovich es no apoyar a su entrenador ante los jugadores. Toma el camino fácil de librarse del hombre de paja”, escribió Hayward. “El próximo debería vigilar sus espaldas”, avisó.