La Dirección General de Aguas de la provincia de Bío Bío instaló en la zona cordillerana nuevos dispositivos que permitirán medir durante todo el año la cantidad de nieve presente, con el fin de tener un registro durante todo el año de la posible crecida del lago Laja producto de los deshielos.

El encargado de esta entidad, Rafael Pérez, confirmó que durante el pasado fin de semana instalaron dichos dispositivos, los que permitirán conocer durante todo el año la altura y cantidad de nieve existente para contar con una idea global de cuánto podría ser la crecida del cuerpo lacustre.

En este sentido, durante el invierno podrán controlar la cantidad y la temperatura del agua que circulará por este torrente. En el verano se conocerá cuánta agua efectivamente podrá entrar producto del deshielo y tomar medidas para solventar la sequía que ha afectado al lago Laja durante los últimos años.

En la actualidad ya hay equipos de medición en la cordillera, pero no dan una visión global al respecto, por ello los nuevos equipos permitirán tener una visión certera de las variaciones del agua que se podrían registrar durante el año en la zona.