Una joya del rock: Subastan el característico auto psicodélico de Janis Joplin

Janis Joplin
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El famoso Porsche psicodélico de la reina del rock Janis Joplin superó todas las expectativas cuando se vendió por 1,76 millones de dólares (1.200 millones de pesos chilenos) en Nueva York este jueves en un remate que duró 5 minutos, informó la subasta RM Sotheby’s.

El descapotable de 1964, modelo 356C 1600 y pintado a medida todavía pertenecía a la familia Joplin y fue vendido en una subasta que terminó con aplausos, pues se vendió al triple del precio estimado de 600.000 dólares. Se trata de un precio récord para un Porsche 356 en subasta, explicó un vocero de la casa de remates.

Cuando Joplin -que cantaba “Oh Lord, won’t you buy me a Mercedes-Benz” (Oh Dios, no me comprarías un Mercedes-Benz?”)- decidió adquirir un Porsche, compró el vehículo pero su color blanco le pareció muy aburrido. Así que mandó pintarlo de color rojo con un fresco lleno de mariposas y medusas en la que figuraba ella misma junto a su banda.

El subastador abrió el remate con una base de 300.000 dólares (200 millones de pesos chilenos) en una sala repleta de postores ansiosos. Mientras el personal de RM Sotheby’s manejaba un tablero de teléfonos, el precio se disparó a 600.000 dólares.

Cuando las ofertas alcanzaron un millón de dólares la sala irrumpió en aplausos. En cinco minutos el automóvil se vendió, por USD 1,76 millones, incluyendo la prima del comprador.

“El 356C de Janis Joplin es sin lugar a dudas uno de los Porsches más importantes de todos los tiempos”, afirmó Ian Kelleher, el director de la division de la Costa Oeste de RM Sotheby’s, cuando anunció la venta.

“Es un automóvil fantástico que trasciende el arte, la cultura pop y los movimientos sociales, y es tan revolucionario y deslumbrante como la misma cantante”, cuenta.

Cabe señalar que Joplin se pasaba manejando el coche que estacionaba frente al hotel Hollywood donde murió de una sobredosis en 1970. Desde ese momento, el Porsche pasó a manos de su familia, que lo prestó al salón de la fama del rock en Cleveland, donde estuvo expuesto desde 1995 hasta que la familia decidió venderlo.

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El famoso Porsche psicodélico de la reina del rock Janis Joplin superó todas las expectativas cuando se vendió por 1,76 millones de dólares (1.200 millones de pesos chilenos) en Nueva York este jueves en un remate que duró 5 minutos, informó la subasta RM Sotheby’s.

El descapotable de 1964, modelo 356C 1600 y pintado a medida todavía pertenecía a la familia Joplin y fue vendido en una subasta que terminó con aplausos, pues se vendió al triple del precio estimado de 600.000 dólares. Se trata de un precio récord para un Porsche 356 en subasta, explicó un vocero de la casa de remates.

Cuando Joplin -que cantaba “Oh Lord, won’t you buy me a Mercedes-Benz” (Oh Dios, no me comprarías un Mercedes-Benz?”)- decidió adquirir un Porsche, compró el vehículo pero su color blanco le pareció muy aburrido. Así que mandó pintarlo de color rojo con un fresco lleno de mariposas y medusas en la que figuraba ella misma junto a su banda.

El subastador abrió el remate con una base de 300.000 dólares (200 millones de pesos chilenos) en una sala repleta de postores ansiosos. Mientras el personal de RM Sotheby’s manejaba un tablero de teléfonos, el precio se disparó a 600.000 dólares.

Cuando las ofertas alcanzaron un millón de dólares la sala irrumpió en aplausos. En cinco minutos el automóvil se vendió, por USD 1,76 millones, incluyendo la prima del comprador.

“El 356C de Janis Joplin es sin lugar a dudas uno de los Porsches más importantes de todos los tiempos”, afirmó Ian Kelleher, el director de la division de la Costa Oeste de RM Sotheby’s, cuando anunció la venta.

“Es un automóvil fantástico que trasciende el arte, la cultura pop y los movimientos sociales, y es tan revolucionario y deslumbrante como la misma cantante”, cuenta.

Cabe señalar que Joplin se pasaba manejando el coche que estacionaba frente al hotel Hollywood donde murió de una sobredosis en 1970. Desde ese momento, el Porsche pasó a manos de su familia, que lo prestó al salón de la fama del rock en Cleveland, donde estuvo expuesto desde 1995 hasta que la familia decidió venderlo.

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