Estados Unidos enviará cerca de 100 soldados a Irak para luchar contra el grupo Estado Islámico (EI) en ese país y en la frontera Siria, indicó un portavoz del ejército este miércoles.

“Probablemente (serán) unos 100, puede que un poco menos”, dijo el coronel Steve Warren.

Los comentarios de Warren llegan un día después de que el secretario de Defensa estadounidense, Ashton Carter, anunciase que se están desplegando tropas “especializadas” en Irak y Siria para ayudar a combatir a los yihadistas del Estado Islámico.

Por su parte, el primer ministro Iraquí Haider al-Abadi dijo que su país no necesita tropas extranjeras para derrotar al grupo EI, pero no rechazó directamente el despliegue de soldados estadounidenses.

No obstante Warren aclaró que los soldados que serían enviados a Irak son “fuerzas de asalto, un pequeño número de comandos altamente cualificados y muy precisos”.

Mientras que Carter había puntualizado que “estos operadores especiales con el tiempo serán capaces de realizar ataques, liberar rehenes, obtener información y capturar a líderes del Estado Islàmico”.

El fortalecimiento de la intervención de las fuerzas especiales marca la voluntad de Washington de intensificar su esfuerzo contra el grupo Estado Islàmico, luego de más de 15 meses de campaña, limitando un poco más el principio de “no soldados en el terreno” (no boots on the ground) expresado por el presidente Barack Obama.

Hasta la fecha, Estados Unidos había privilegiado los ataques aéreos contra el EI, además de enviar unos 3.500 consejeros militares y asesores a Irak, que no participan en los combates.