Una difícil situación familiar es la que vive Jorge Muñoz Martínez en Osorno, luego de que pasado 20 de noviembre, su esposa falleciera y a quien no ha podido dar sepultura.

Se trata de María Sonia Coronado Cárdenas, quien padecía una serie de patologías médicas, siendo la más compleja e invalidante la obesidad mórbida, donde su peso oscilaba entre los 250 y 300 kilos.

Tras el deceso de la mujer a causa de una insuficiencia cardíaca, el cuerpo fue derivado hasta el Servicio Médico Legal, ya que por su magnitud no podía ser mantenido en la morgue del Hospital Base de Osorno.

Al ya complejo escenario se sumaron los costos de la urna, donde una funeraria osornina estuvo dispuesta a confeccionarla por un valor cercano al 1 millón 200 mil pesos, monto que Jorge Muñoz dice no tiene cómo costear.

Cabe señalar que dentro de las entidades que se han pronunciado para prestar ayuda al municipio de Osorno y la Gobernación, sin embargo hasta el momento se ha logrado reunir poco más de la mitad del dinero necesario para costear la urna.

Sin embargo, el dolor que embarga a la familia de la mujer aumenta, puesto que ya ha transcurrido una semana y sólo llevan una parte del dinero por lo que temen continúe pasando el tiempo para realizar la sepultura.