Cansado de ver versiones poco reales de los personajes de Rugrats como adultos, uno de los dibujantes de la serie animada quiso despejar las dudas y mostró su propia versión.

Eric Molinsky, quien trabajó en el guión gráfico del programa de Nickelodeon, dijo que estaba aburrido de ver que varios artistas mostraran a estas caricaturas como adultos glamorosos y sofisticados. Y puso de ejemplo lo hecho hace un tiempo por Isaiah Stephens.

“Realmente me molesta -no la calidad de la obra, pero la interpretación-. Nos referimos a ellos como bebés desaliñados por una razón. Si alguna vez hubiésemos dibujamos a los Rugrats demasiados lindos, nuestro productor ejecutivo nos hubiera retado”, explicó en una columna publicada en el portal Studio360.

Por lo mismo, Molinsky decidió hacer su propia interpretación de los Rugrats como adultos.

“No, no todos los Rugrats llegarán a ser modelos o hipsters seguros de sí mismos, especialmente Carlitos. Probablemente crecieron hasta ser normales (…) al igual que sus padres”, dijo el artista.

Según muestran las ilustraciones de Molinsky, los dibujos se parece mucho a los padres de éstos en la serie, especialmente Angélica, quien lleva un traje y está pegada a su teléfono celular, tal como se mostraba a su madre en la serie.

Tommy y Carlitos

Una foto publicada por Studio 360 (@studio360show) el

Fili y Lili

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Angélica y Susie

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Dil y Kimi

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Las interpretaciones que no gustaron a Molinsky

Recordemos que Isaiah Stephens, autor del blog Izzy Doodle Dump, y a quien Molinski apuntó en su publicación, dio esta idea de cómo imaginaba a los personajes de adultos.

Isaiah Stephens

Isaiah Stephens

En tanto, Celeste Pille, otra ilustradora citada por Molinsky, presentó esta visión.

Celeste Pille

Celeste Pille

Tras su artículo, algunos fanáticos de estos dos dibujantes se molestaron. Por lo mismo, Molinski decidió publicar una disculpa.

“Quiero ofrecer disculpas a los aficionados y artistas que encontraron mi tono arrogante o desdeñoso”, dijo el ilustrador, señalando que eligió esas obras de ejemplo porque le parecieron que estaban bien dibujadas y los artistas eran talentosos, pero mostraban un glamour que no se condecía con la esencia de Rugrats fijada por el estudio de animación, del cual él sólo era un empleado más.