Demora y poca coordinación es lo que algunos alcaldes de la región de Coquimbo han criticado en la entrega de ayuda a los damnificados, a dos meses de ocurrido el terremoto del 16 de septiembre.

Es por esto que el intendente Claudio Ibáñez ha tenido una serie de reuniones con los ediles de las principales comunas dañadas, de manera de fijar un plan de trabajo coordinado con esos municipios y abordar los desafíos y compromisos pendientes que son principalmente las viviendas de emergencia, los bonos productivos y despejes de algunos caminos rurales.

La autoridad del Gobierno Regional señaló que “los procesos de emergencia son de largo aliento. Hoy vimos los aspectos críticos en materia de reconstrucción porque estamos monitoreando los avances. Tenemos la fuerza para avanzar más rápido, pero necesitamos ir potenciando la gestión en el desarrollo de este tipo de actividades”.

Agrega que desde el primer momento se ha gestionado ayuda y coordinado los servicios, “pero siempre es importante contar con la información oportuna de los alcaldes para mejorar los procesos y mecanismos de ayuda”.

Para esta labor, el intendente Ibáñez comprometió aumentar la frecuencia de las reuniones de coordinación de la emergencia para evaluar los avances por semana.

El alcalde de Monte Patria, Juan Carlos Castillo, indicó que “se aclararon los hechos (…) Quedamos en volver a juntarnos. Va a haber comités operativos los días miércoles en la Gobernación de Limarí y los lunes en la intendencia donde van a ir destrabando los cuellos de botellas que se están formando”.

Críticas desde Choapa

El alcalde de Los Vilos, Manuel Marcarián, afirmó que entre los ediles -principalmente de los municipios rurales- han conversado que no se ha realizado una coordinación con las oficinas municipales, con el tema de la ayuda y entrega de los bonos de reconstrucción al igual que con las viviendas de emergencia.

“Ayer sostuvimos una reunión con el intendente Ibáñez y los seremis de las carteras involucradas y trabajaremos de lunes a lunes para ver los avances. Se coordinó una reunión para el miércoles para en terreno señalarnos a nosotros y la gente en qué situación estamos con la ayuda”, detalló.

Respecto a la demora en entrega de viviendas de emergencias, el edil de la comuna de Choapa sostiene que “en la comuna hay 14 casas dañadas que deben ser demolidas y sólo nos han llegado tres . En lo de bonos productivos se han demorado y la gente se ha mostrado descontenta y no conoce la realidad, si el Gobierno nos informara le podríamos explicar”.

Marcarián señaló que de persistir la demora y que las reuniones con la autoridad central no fructifiquen se deben tomar medidas en conjunto con los municipios.

“Teniendo en cuenta además que las comunas afectadas son de la Nueva Mayoría, son gente nuestra que votó por el gobierno de la presidenta Bachelet. No podemos dar una señal de quiebre entre las autoridades regionales y locales cuando sabemos que tenemos los recursos y los elementos para ayudar a esta gente, que no puede esperar más”, afirmó.

El alcalde de Canela, Bernardo Leyton, señaló que a su comuna han llegado 99 viviendas de emergencias, de las cuales unas están instaladas y otras por armar todavía.

“Se espera que lleguen unas 300, por eso es importante apurar el paso en la instalación de estas viviendas. También es necesario despejar los caminos cortados hacia los piques de los pirquineros. La verdad es que nos ha llegado ayuda, pero esperamos que sea todo más ágil”, explicó.

Para el edil de Illapel, Denis Cortés, la situación se debe agilizar y buscar otros parámetros para entregar la ayuda.

“Queremos que sea más rápido y pro activo, como municipalidad hemos creado una mesa de reconstrucción y recuperación, que esto último tiene que ver con el ánimo de la gente, se preocupan de lo material, palo y cemento, y no del estado psicológico de las personas”.

Cortés señala que le han entregado más de 60 viviendas de las cuales 40 están instaladas. “Otro tema no visto es el del comercio, necesitamos un barrio comercial, tenemos muchos arrendatarios que no han podido reiniciar su actividad”, agregó.

“Los instrumentos del Estado deben estar orientados a los problemas actuales, se está evaluando de acuerdo a las ventas anuales o balances y no de acuerdo a que fueron afectados por la catástrofe. Hay gente que llevaba recién 6 meses trabajando y quedan fuera de los beneficios”, dijo.

El edil illapelino afirma que es mucha la gente a la que no se le ha podido aplicar las fichas. “Se debe apurar el tranco con la ayuda, nosotros tratamos de cooperar, pero la responsabilidad es del Gobierno, necesitamos más ayuda y que se apliquen las respectivas fichas en el sector rural”.