Aseguran que no fue representativa la participación ciudadana que se hizo hace dos años en el marco del estudio de impacto ambiental y que luego la misma empresa suspendió y retomó la semana pasada.
Viviana Mella, vocera de la corporación pro defensa del medio ambiente de Copiulemu, plantea que hoy tampoco se han establecido conversaciones con los vecinos, que mantienen un sinnúmero de interrogantes sobre el proyecto.
Alejandro Reyes, abogado de los vecinos, cree que ha pasado demasiado tiempo desde que se llevó a efecto la participación ciudadana en la que asegura, la empresa, tomó todos los resguardos para que la comunidad no supiera.
Se declaran además inquietos por los materiales que se autorizaría a depositar con este proyecto. Y como saben que parte del asbesto que se retiró de Bocamina 1 fue dispuesto en el relleno sanitaria, se preguntan desde cuándo y qué otros residuos industriales se han estado llevando a Copiulemu.
En este sentido, Omar González, vocero de la agrupación de trabajadores contra el asbesto, dijo que han recogido versiones de trabajadores del vertedero sobre la manera inadecuada en que éste se habría tratado.
En el escrito presentado ante el Servicio de Evaluación Ambiental también pidieron poner atención en el Estero Curapalihue, rico en flora y fauna nativa, y que según los pobladores se vería afectado por el vertimiento directo de aguas aflorantes laterales.
