Justo cuando la tensión con Perú por el denominado triángulo terrestre se acrecienta, sumado al malestar que ha representado Bolivia por el ejercicio combinado de las Fuerzas Armadas “Huracán 2015”, la presidenta Michelle Bachelet materializó una prolongada reunión en La Moneda con los ministros del Interior, Jorge Burgos; Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, y Defensa, José Antonio Gómez.

Si bien no se entregaron mayores detalles, desde las carteras que participaron en la reservada cita reconocieron que el foco estuvo en el momento que se vive con los países vecinos.

Reunión que según Presidencia de la República estaba agendada desde el lunes, pero que se extendió más de lo presupuestado.

Ejemplo de la demora fue que por agenda la gobernante debía recibir a las 8:45 de la mañana al director de la División de las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivando, el que tuvo que esperar por más de 40 minutos hasta que Bachelet logró desocuparse.

Incluso, quedó registrado en los audios de las cámaras de televisión que la mandataria entró al salón de audiencias de La Moneda ofreciéndole disculpas por la demora a Vivanco, explicando que “estaba reunida con mis ministros”.

Cita que se materializa a tres días de que la jefa de Estado llegue a la Región Tarapacá, especialmente a Pampa Perdiz, para encabezar los ejercicios en que cerca de 5.500 efectivos de las FF.AA. demuestran lo aprendido en sus respectivas escuelas en materia de defensa del territorio, la protección a la ciudadanía en caso de catástrofes y la cooperación internacional.

Entre los elementos desplegados en dicha simulación de combate, el Ejército dispondrá de tanques; la Armada, de fragatas y submarinos, y la FACh, de aeronaves de combate y transporte.

BOLIVIA Y SU ENOJO

El despliegue castrense fue criticado por el presidente boliviano Evo Morales, quien acusó un “afán” intimidatorio de Chile. Sin embargo, desde el Ministerio de Defensa y del Estado Mayor Conjunto, aseguraron que el ejercicio es normal y fue avisado a los países vecinos.