Reconociendo sus 77 años como limitante para regresar a la Presidencia, Ricardo Lagos Escobar no mostró mayor interés en que su nombre se inscriba para la carrera a La Moneda a las elecciones de 2017.

“Yo creo que para un hombre de mi edad el futuro está un poquito pasado”, señaló el ex mandatario en entrevista con el diario español El País.

Si esas palabras ya daban a entender que se restaría de competir por el sillón presidencial, él mismo se encargó de dejar en claro que sus objetivos están lejos de regresar a la cabeza del Poder Ejecutivo: “Respecto a que en dos años hay elecciones, las encuestas…, no, no, yo ya fui presidente”.

También, Lagos aprovechó de criticar el actuar marco que regula el financiamiento a la política, vigente desde la mitad de su mandato. Los bullados casos de corrupción conocidos en el último tiempo, para él, “son consecuencia de la ley electoral de 2003″.

Afirmó en este sentido que, debido a que no contaba con mayorías, fue condicionado por el conglomerado opositor a que “las empresas pudieran dar dinero a los partidos” para que la reforma tuviera el visto bueno.

En cuanto al difícil escenario que ha enfrentado la presidenta Michelle Bachelet, sobre todo a raíz de la participación de su hijo Sebastián Dávalos en la polémica compra y venta de terrenos en Machalí, Lagos destacó que el capital de la mandataria radica en “su credibilidad” y “su honestidad” y que ha tomado “las medidas necesarias” ante el problema.