Mario Vargas, uno de los voceros del movimiento Laicos y Laicas de Osorno, manifestó no sentirse sorprendido por la no venida del papa Francisco a nuestro país el próximo año, la que fue confirmada por el cardenal Ricardo Ezzati.
Este último afirmó que la postergación de su llegada a Chile se debería a las actividades del Año de la Misericordia, junto con la confirmación de su visita a México y su posible arribo a Colombia.
En este sentido, Vargas desestimó las explicaciones de Ezzati, asegurando que desde que el papa Francisco nombró a Juan Barros como obispo de Osorno, los fieles católicos sin investidura se han convertido en una “espina en el zapato” para el jefe del Estado Vaticano, debido a que desde el anuncio del nombramiento de Barros, el movimiento se ha manifestado en diferentes formas para mostrar su descontento contra quien fuera apuntado como el encubridor de los abusos perpetrados por Fernando Karadima en la Parroquia de El Bosque.
Asimismo agregó que por esa razón el Papa no viene a Chile, ya que estaría esperando que la Iglesia Católica en nuestro país resuelva el conflicto.
Vargas finalizó diciendo que aún espera la respuesta a la nota de reclamo enviada por la Municipalidad a la Cancillería por los dichos del Papa, donde trata de “tonta” a la ciudad. Agregó que continuarán con sus manifestaciones hasta que Barros renuncie a seguir siendo el obispo de la ciudad
