Pese a que los trabajadores de la marina mercante habían anunciado la paralizacion de toda la flota de la zona sur austral del país a partir de esta medianoche, un compromiso del Gobierno evitó la movilización que se pretendía realizar tras romperse la mesa de diálogo.

A juicio de los dirigentes del cabotaje marítimo, las propuestas presentadas en la mesa de diálogo por el Gobierno en Puerto Montt eran un traje a la medida para los empresarios y no resguardaban las mínimas condiciones laborales para el sector.

El presidente del Consejo de la Zona Sur Austral de la Marina Mercante, Juan Fernández, señaló que tras una larga reunión el Ejecutivo se comprometió a iniciar un proceso de rigurosa fiscalización a partir del 10 de noviembre, esperando que las autoridades cumplan, de lo contrario la paralización se hará efectiva ese mismo día y de manera indefinida.

Eran más de 220 naves las que paralizarían a contar de esta medianoche con una tripulación de aproximadamente 1.000 personas, afectando principalmente el traslado de insumos para la industria salmonera de la zona sur del país.

Desde el Gobierno se indicó que se ha realizado un esfuerzo importante para restablecer las confianzas y mantener la Mesa Marítima como la instancia de diálogo entre trabajadores, empresarios y Gobierno. No obstante, los trabajadores del cabotaje marítimo enfatizaron en que si no se cumple la palabra empeñada la paralización tendrá carácter indefinido.