Carabineros de Punta Arenas atrapó a un individuo que se mantenía prófugo de la justicia desde hace 7 años por el delito de robo con violencia y sustracción de menor.

El sujeto identificado como Cristián Marcelo Silva Yones fue detenido en un local nocturno de la capital magallánica tras un control rutinario en el que la policía uniformada le solicitó su identificación. Sin embargo, éste se negó a entregarla.

Por lo anterior el personal policial verificó sus antecedentes los que arrojaron que se trataba de un condenado por delitos de robo con violencia y sustracción de menores, y que se mantenía con una orden de detención desde el año 2008, luego de haber sido condenado a 15 años de cárcel, los cuales nunca entró a cumplir a recinto penitenciario.

En la audiencia de control de detención, la jueza Paula Stange decretó el traslado de Cristián Marcelo Silva Yones por la orden que mantenía desde el tribunal de San José de la Mariquina, donde deberá ingresar a cumplir su sentencia en la región de Los Ríos, según consigna nuestro medio asociado Diario El Pingüino.

Antecedentes

En 2008 Silva Yones, un obrero de 26 años, fue condenado a cinco años y un día de cárcel por robo con violencia y por su participación en la sustracción de menores a otros diez años.

De acuerdo a la sentencia del Tribunal Oral en lo Penal de Valdivia el año 2008, los hechos tuvieron su origen el 29 de mayo de 2007 cuando interceptaron a un joven de 14 años que transitaba en dirección a su liceo, en la comuna de Lanco.

En esa oportunidad Silva Yones, en compañía de Alexis Sáez Troncoso, de 22 años, golpearon a la víctima, lo arrojaron al suelo y le sustrajeron las zapatillas. Posteriormente, el 12 de junio, a las 8:15 horas de la mañana, y en circunstancia que el joven se dirigía nuevamente a su liceo, lo volvieron a interceptar cuando cruzaba una línea férrea.

Esta vez lo golpearon y le taparon su cabeza con un gorro, trasladándolo unos 100 metros para luego dejarlo al interior de un vehículo.

En el móvil tras atarlo de pies y manos, le taparon la boca con una corbata. Más tarde lo llevaron a un sitio eriazo -cerca del peaje de Lanco- y lo arrojaron a un canal que por fortuna estaba seco, dándole puntapiés en las costillas. El joven fue hallado posteriormente por Carabineros.

En esa oportunidad Sáez Troncoso fue condenado a diez años y un día por el delito de robo con violencia y otros diez años más por el delito de sustracción de menores, mientras que Silva Yones fue condenado a cinco años y un día de cárcel por robo con violencia y por su participación en la sustracción de menores a otros diez años, pena de la que se fugó y refugió en Punta Arenas hasta que fue hallado la madrugada de ayer.