El presidente ruso, Vladimir Putin, repitió este domingo que Moscú no enviará tropas terrestres a Siria, donde Rusia lleva a cabo una intensa campaña de bombardeos en apoyo del régimen de Bashar al Asad.

“No nos planteamos hacerlo y nuestros amigos sirios lo saben”, declaró Putin al canal de televisión ruso Rossiya 1.

Según el presidente ruso, el objetivo de su intervención militar en Siria es “afianzar a las autoridades legítimas y crear las condiciones necesarias para hallar un compromiso político”.

Putin descartó que Rusia esté involucrada en una carrera armamentista con Occidente, a pesar de la demostración de fuerza del ejército ruso, que golpeó varios blancos con misiles de crucero lanzados desde más de 1.500 kilómetros de distancia.

“No se trata de una carrera armamentista. Se trata del hecho de que las armas modernas mejoran y cambian”, explicó el presidente ruso.

El ministerio ruso de Defensa anunció este domingo que golpeó 63 blancos en Siria durante las últimas 24 horas.

Desde el inicio de su intervención en Siria, el pasado 30 de septiembre, Rusia, fiel aliada de Damasco, efectuó bombardeos desde sus aviones de combate y sus cruceros situados en el mar Caspio, pero no desplegó tropas terrestres.