El Fuerte Ballenar de Antuco, uno de los tantos refugios creados por los españoles en la región del Bío Bío, hoy está reducido a una plataforma y algunas paredes.

La construcción ubicada en el sector Villa Los Canelos, a 15 kilómetros del centro de la ciudad, fue fundado en 1770 por Ambrosio O’Higgins y dispuesto estratégicamente en ese lugar para defender el paso cordillerano de las comunidades pehuenche.

El alcalde de la comuna, Claudio Solar, afirmó que hoy sólo hay leves vestigios de lo que alguna vez fue el fuerte, lamentando el que no se pueda restaurar por estar ubicado en un terreno privado, por lo que se pierde una parte importante de la historia de la comuna, apuntó.

El coordinador en la Región del Bío Bío del Consejo de Monumentos Nacionales, Alexis Muñoz, se refirió a la situación de la estructura ubicada en Antuco, comentado que el problema pasa -tal como menciona el alcalde- por encontrarse en un terreno privado y según la ley la restauración de este corresponde a los dueños del terreno, por lo que es muy difícil que fondos púbicos sean destinados a la mantención del fuerte.

Consignar que una situación similar está viviendo el fuerte de San Carlos Purén el cual actualmente está convertido en un basural. En caso de que ambas edificaciones pudieran ser restauradas, se rescataría un trozo importante de la historia de las comunas en donde están emplazados, afirmaron las autoridades.