Estados Unidos anunció el viernes que aumentará el control de los vehículos diésel tras descubrirse que Volkswagen trucaba sus motores para que parecieran menos contaminantes.

“Las tecnologías evolucionan y debemos adaptarnos”, dijo Christopher Grundler, funcionario de la agencia estadounidense de control ambiental (EPA). Añadió que los fabricantes de autos ya fueron avisados del aumento de los controles.

“Desarrollamos un nuevo enfoque y una nueva perspectiva”, dijo Grundler.

Volkswagen engañó las inspecciones de las autoridades estadounidenses al dotar a casi medio millón de autos diésel de un programa que falseaba las emisiones de gases contaminantes del vehículo de modo que se ajustaran a los requerimientos legales.

La agencia realiza desde el viernes tests de autos diésel “que están en circulación” en Estados Unidos para detectar si cuentan con sistemas similares.

El funcionario rehusó dar detalles de los nuevos procedimientos para que los constructores no hagan adaptaciones a los autos antes de que sean revisados.