Tras el terremoto de magnitud 8.4 y el posterior tsunami que se registraron en el norte del país, el Gobierno tiene un nuevo desafío para asignar recursos destinados a la reconstrucción.

El ministerio del Interior reveló que entre enero y junio de 2015 se gastó $89 mil millones de pesos debido a emergencias, como los aluviones en la región de Atacama donde se desembolsaron $34 mil millones.

Según consigna La Tercera, durante todo el 2014 se gastaron $79 mil millones, de esta cifra, el mayor porcentaje corresponde a los incendios en Valparaíso y el terremoto en la región de Tarapacá.

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Al respecto, la ex directora de Presupuestos de la administración anterior, Rosana Costa, manifestó que “todas las veces que se hace un presupuesto se abre, en los ministerios de Agricultura e Interior, un par de líneas para situaciones de emergencia. Son cuentas a las cuales se les inyectan recursos en estos casos”.

Por su parte, el ex director de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Alberto Maturana, indicó a La Tercera que “el estado de catástrofe o de excepción permite que el gasto sea más expedito, se aceleran acciones administrativas a fin de responder rápido. Se pueden autorizar gastos especiales desde muchas fuentes y llegar a ser hasta el 2% del presupuesto de la nación”.

Sobre el destino de los recursos, desde el ministerio del Interior señalaron que van en “atención inmediata de damnificados; entrega de subsidio, bonos de reposición de enseres y vestuario, de arriendo y de acogida familiar; implementación de barrios de emergencia y/o entrega de este tipo de viviendas, y contratación de maquinaria y servicios para las acciones de normalización”.

En tanto, se está a la espera que el Gobierno entregue una cuantificación de la tragedia ocurrida durante esta semana, que dejó completamente destruida la caleta de Coquimbo y generó serios daños en el sector Baquedano de la ciudad puerto, esto, sin contar los daños en las localidades al interior de la IV región y en las decenas de caletas en la zona -como la de Tongoy- que ya habían sufrido las consecuencias de los temporales que se registraron este año.