El entrenador de Universidad Católica, Mario Salas, mostró escasa autocrítica por la eliminación de Copa Chile por penales ante Cobreloa, actualmente en Primera B, e incluso valoró el triunfo 2-0 sobre los naranjas en los 90 reglamentarios.

El técnico de los cruzados, si bien reconoció de entrada en rueda de prensa que “no están bien los jugadores porque no logramos el objetivo”, recalcó que tiene la “grata sensación, dentro de la amargura, que se jugó un muy buen partido y se hicieron cosas bien, pero en la tanda de penales ellos fueron más precisos”.

Salas, por ello, admitió que “no sé si hablar de fracaso, pero sin dudas sumamos el aspecto negativo del no logro del objetivo que nos habíamos propuesto”. Ello, pese a quedar fuera en un torneo donde avanzaron sus dos clásicos rivales: Colo Colo y Universidad de Chile.

De todas formas, el ‘Comandante’ aclaró de inmediato que irán por los otros dos frentes: Apertura y Sudamericana, y recalcó que no siente “más presión” de ser campeón a nivel local, aunque sabe que como mínimo debe luchar por volver al ámbito internacional.

“Esto se lamenta, nos entristece mucho y nos da rabia. Pero hay que buscar ese cupo (internacional) en el otro campeonato que nos queda. ¿Más presión? No, porque el objetivo era ir por los tres torneos. Ahora tenemos que llegar lo mejor parados ante O’Higgins, vencerlos y seguir peleando por alcanzar a Colo Colo. Y luego pasar a Libertad en Copa Sudamericana”, dijo.

El exSeleccionador Nacional Sub 20 admitió que se debe mejorar el poder de finiquito. “Hay cosas que debemos mejorar, nos generamos una muy buena cantidad de ocasiones de gol, pero no subimos porcentaje de eficiencia. Estuvimos muy sólidos atrás y mostramos ser un equipo muy equilibrado… con ganas y actitud de ir al frente. Los jugadores dejaron todo en el campo de juego, no lo pudimos refrendar en tanda de penales”, dijo.

Por último, Mario Salas remató aseverando que “en cuanto a lo que se vio (en el juego), nos deja tranquilos. Creemos que este equipo muestra una constante que, más allá de una rachita negativa de no poder convertir, podemos perfectamente anotar dos goles en cualquier lugar del mundo”, sentenció.