Varias reacciones se generaron en el mundo político tras las declaraciones que el ministro secretario general de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre, entregó a El Mercurio, en donde dijo que problemas de salud y delincuencia son inaceptables, y aseguró que el diseño y la tramitación de las reformas del gobierno de la presidenta Michelle Bachelet han sido deficientes.

Es el ministro más cercano a la presidenta Michelle Bachelet, estuvo 15 meses al mando de la cartera de Educación, antes de aterrizar en la Secretaría General de la Presidencia. Nicolás Eyzaguirre, el mismo que estaba cultivando un bajo perfil comunicaciones al interior en el Gobierno, habló, y lo hizo para realizar un duro análisis, similar al que personeros de la otrora Concertación han profundizado con fuerza en los últimos meses sobre la actual Mandataria.

Fue así que Nicolas Eyzaguirre, “Nico” como le dice en privado Bachelet, entregó un honesto diagnóstico sobre la navegación de la administración de Gobierno, afirmando que desde que asumieron, observó que claramente estaban metidos en una vorágine de reformas que no iban a ser capaces ni de diseñar apropiadamente, ni de tramitar políticamente, sin provocar excesivos conflictos.

Profunda autocrítica en la que apuntó a la gestión que, según dijo, va más allá de las reformas estructurales que han tratado de impulsar. En esta línea, también asumió que hay otros asuntos con problemas inaceptables que merecen la atención del Gobierno.

“La gestión del Gobierno no ha sido buena, los problemas que tenemos en salud y seguridad ciudadana son inaceptables, hay que mejoraron sí o sí”, advirtió.

En la entrevista, Eyzaguirre también se refirió a los problemas de liderazgo de la presidenta Bachelet, y los ataques que ésta ha sufrido desde el mismo oficialismo.

Señaló que “hoy se atacan unos a otros de manera brutal”, dejando sobre la mesa las divisiones que algunos temas de las diferentes reformas han generado entre partidos del oficialismo, como el caso de la Democracia Cristiana y el PC. Con esto, Eyzaguirre pone un manto de dudas sobre la continuidad del conglomerado oficialista luego de este Gobierno.

Se trata de un complejo panorama que es parte del análisis interno que se da en La Moneda, donde varios sostienen que la línea trazada se perdió, pese a que otros muestran dudas al respecto.

El presidente de la Democracia Cristiana, senador Jorge Pizarro, criticó las palabras de Eyzaguirre, y recordó que esas “observaciones” se hicieron durante la elaboración de los proyectos de la reforma educacional, en el período en que el actual jefe de la Segpres aún era ministro de Educación.

Otro que criticó la postura de Eyzaguirre fue el presidente del MAS, senador Alejandro Navarro, quien calificó de “tozuda” la postura que tuvo el personero de gobierno en el comienzo de la reforma educacional.

Desde el Partido Radical, el presidente de la colectividad, Ernesto Velasco, valoró el duro análisis.

Nicolás Eyzaguirre también abordó el tema Caval, el cual sindicó como el punto de quiebre y del inicio de la desconfianza a la credibilidad de la presidenta Michelle Bachelet.

Declaración que para algunos fue leída como un cambio de giro, coordinado obviamente con la mandataria, especialmente al terminar por enterrar las reformas. Por esto, se esperan señales o acciones concretas, especialmente cuando la encuesta Adimark de la semana pasada situó en apenas 24% de aprobación y 72% de desaprobación para la mandataria.

Palabras que si no son ratificadas por Bachelet y con claras señales de cómo continúa esta administración, podrían generar graves perjuicios para el Ejecutivo, en caso que saliera a desdecir a Eyzaguirre, por lo que, nuevamente, se augura una tensa semana.