El expresidente argentino Carlos Menem (1989-1999) se negó este jueves a declarar en el juicio donde se le acusa por supuesto encubrimiento por el atentado contra el centro judío AMIA en 1994, informó una fuente judicial.

Menem, actual senador nacional por el peronismo gobernante y uno de los imputados de desviar y obstaculizar la investigación del ataque, sigue mediante videoconferencia desde La Rioja (noroeste) el juicio que se sustancia en la capital argentina por aducir problemas de salud.

Su declaración había concitado atención luego de que su defensor aludiera a que Menem guarda supuestos secretos de Estado referentes al atentado contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) que mató a 85 personas e hirió a 300.

Menem “puede ser relevado del secreto para declarar, pero se trata de razones de Estado que pueden afectar al Gobierno actual, a los intereses de la Nación y la convivencia pacífica con otras naciones”, había dicho días atrás el letrado Omar Daer, sin dar más detalles.

El abogado de Menem también indicó que su patrocinado convocó a “servicios de inteligencia de Estados Unidos, Gran Bretaña, Israel y Brasil” después del atentado para ayudar a su esclarecimiento.

“Las querellas hicieron notar que Menem no tiene ningún deber normativizado de guardar secreto, por lo que puede declarar con absoluta libertad”, había señalado Memoria Activa, querellante como representante de las víctimas del atentado.

Un tribunal comenzó hace dos semanas a tratar la acusación de encubrimiento que pesa sobre Menem, de 85 años, así como sobre funcionarios e incluso un expresidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), Rubén Beraja.

La Justicia argentina ha acusado como autores intelectuales del ataque a exgobernantes de Irán, entre ellos al expresidente Ali Rafsanjani, sobre los que existe un pedido de arresto internacional.

Un acuerdo firmado en 2013 con Irán para que los imputados fueran indagados fracasó y la causa permanece estancada.