En algunas ocasiones una mirada dice más que mil palabras. Razón por la que en muchas situaciones con solo mirar a alguien podemos percibir que determinación tomará.

Algo que quedó demostrado en un estudio científico, el cual arrojó que los ojos revelan las decisiones que alguien tomará con respecto a una situación particular.

En la investigación del Department of Psychology and Leiden Institute for Brain and Cognition, Leiden University, se detalla que con la medición de las pupilas se puede identificar la precisión con la que las personas toman diferentes determinaciones en su vida diaria.

Del mismo modo, el estudio publicado en PLOS Computational Biology explica que una pupila grande, es una clara señal que las personas están dispuestas a realizar algo o tenían toda la disposición de hacerlo. Sin embargo, la pupila dilatada indica que los individuos suelen ser menos coherentes a la hora de entregar una declaración o comportarse de cierta forma.

Flickr | Walt Stoneburner

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Con esto, los autores aseguran que la capacidad de respuesta de una persona, tal como se mide con el tamaño de la pupila, es un factor determinante de la variabilidad de las decisiones que se toman sobre el mundo que los rodea. “Cuando una persona es hipersensible, la toma de determinaciones es menos fiable y es más probable que se obtengan resultados indeseables”, señalan los investigadores de dicho estudio.

Pero eso no es todo, pues debemos recordar que los ojos son la ventana de entrada hacia la salud, ya que “mirando esa zona del rostro, podemos ver cosas como las arterias, venas y nervios, que son un reflejo de lo que está pasando en el resto del cuerpo”, dice Rahul Khurana, doctor y especialista en retina, en el norte de California.

Es por eso que la Academia Americana de Oftalmología recomienda hacerse un examen de la vista a más tardar a los 40 años. Dependiendo de los resultados, el médico decidirá con qué frecuencia deberá repetirse. Sin embargo, el especialista sostiene que los ojos pueden advertir de patologías tales como: estrés, presión arterial alta, psoriasis, artritis o problemas a la tiroide.

Del mismo modo, una simple mirada puede arrojar tu coeficiente intelectual, si tienes diabetes, si sufres de alguna depresión, si padeces de alguna especie de alergia, o simplemente, si tu sistema nervioso está algo descontrolado.