El presidente peruano Ollanta Humala expresó este domingo por primera vez su apoyo a la despenalización del aborto en Perú en casos de violación, durante una entrevista en televisión donde señaló que las mujeres son las llamadas a decidir sobre su cuerpo.

“Las mujeres deben decidir sobre su propio cuerpo”, aseguró Humala al ser consultado sobre el tema del aborto por el periodista Augusto Álvarez del canal Frecuencia Latina, en un momento que colectivos sociales se movilizan en Lima exigiendo que el Congreso debata este tema tras archivar una propuesta en mayo pasado.

El mandatario peruano, de 53 años y exteniente coronel del ejército, también respaldó la actitud de su esposa Nadine Heredia de publicar el 13 de agosto pasado en su cuenta de Twitter una foto acompañada de sus dos hijas menores manifestando su apoyo a la despenalización del aborto.

La primera dama había entonces tuiteado: “Por nuestros derechos y los de nuestras hijas. Más educación sexual, menos muertes por abortos. #DéjalaDecidir”. Ese mensaje fue replicado por Humala en esa ocasión, pero sin añadir comentarios.

El fin de semana decenas de mujeres realizaron una marcha espontánea luciendo los pechos desnudos y el cuerpo pintado con la consigna “Aborto sí, aborto no, eso lo decido yo”, exigiendo al Congreso que aborde el tema.

La postura de Humala difiere de la que habría señalado a las autoridades de la iglesia peruana cuando antes de las elecciones de junio de 2011 se reunió con el cardenal Juan Luis Cipriani y le señaló su rechazo al aborto, según versiones eclesiásticas.

En Perú, el aborto es legal sólo por malformación grave del feto o cuando peligra la vida de la madre.

En medio de un polémico debate, el Congreso archivó en mayo una iniciativa presentada en 2014 por colectivos feministas, que reclamaban conceder a las mujeres el derecho a decidir sobre su cuerpo, y denunciaban el trauma psicólogico que sufrían las víctimas de violación.

La Iglesia católica, religión mayoritaria en Perú (de los 30 millones de habitantes, 26 millones son católicos, según el Vaticano), lanzó el año pasado una campaña para movilizar a los fieles y a la clase política en contra del proyecto que consideraron una legalización plena del aborto.