Un duro revés sufrieron una vez más los intentos por urbanizar el campamento Manuel Bustos de Viña del Mar, con miras a erradicar uno de los asentamientos irregulares más grandes del país.

Este campamento cuenta con más de 1.000 viviendas que no cuentan con agua potable ni alcantarillado, tampoco alumbrado público. Además, presenta problemas de transporte porque la locomoción colectiva no llega al sector.

Ante esta situación, los diputados de la Democracia Cristiana, Aldo Cornejo y Víctor Torres, decidieron presentar un oficio a la ministra de Vivienda y Urbanismo, Paulina Saball, para que se entreguen detalles al respecto.

Cornejo, expresó que con la respuesta de la ministra podrán determinar qué acciones seguir para poder solucionar las condiciones precarias en las que se encuentran las familias que viven en dicho campamento.

Esta segunda licitación que fue declarada desierta, contemplaba $325 millones para ejecutar un loteo de los terrenos y diseños de ingeniería para el establecimiento de servicios básicos y obras de vialidad.