La mañana de este viernes la presidenta del Partido Socialista, Isabel Allende, se refirió a la movilización realizada por el gremio de camioneros del sur el jueves, situación que provocó estragos en distintos puntos del país.

La senadora expresó que la jornada del jueves fue “un día triste para Chile, no nos gustan las presiones de esa manera, por la fuerza”. Agregando que las instancias de diálogo siempre son importantes en una democracia, pero recalcó que es difícil dialogar cuando se utiliza la fuerza y lo vivido ayer “de alguna manera fue una imposición y nos dolió a todos”

Allende recordó que el ministro Burgos siempre estuvo dispuestos a reunirse con el gremio en La Moneda, de hecho el viernes estaba presupuestada una reunión, sin embargo, los transportistas optaron por no asistir.

Tras esto, el jueves debieron pasar más de 10 horas de bloqueos en la rutas en diversos puntos del país, por lo cual el Gobierno debió buscar una solución y evitar que el problema no siguiera escalando y no interfiriera en la vida de las demás personas.

Sin embargo, Isabel Allende expresó que esa determinación no la dejó contenta, ya que las presiones no son la forma en que debe comportarse una sociedad democrática.

De todas formas la parlamentaria aclaró que como presidenta de un partido oficialista, evidentemente apoya al Gobierno, porque debían buscar una salida al conflicto y recalcó “No es un buen día para nosotros y espero que nos sirva de precedente, cuando el día de mañana que otros que tienen esa fuerza, hagan sus peticiones de esa manera, eso no corresponde y nos nos gusta”.

Recordemos que tras una reunión sostenida la tarde del jueves entre el ministro del Interior y representantes de los transportistas que viajaron desde Temuco, el Gobierno finalmente autorizó que la caravana ingresara a la región Metropolitana, pero sólo permitió que 6 ellos llegaran hasta La Moneda a finalizar la manifestación que comenzó el lunes.