Escenario hipotético. Tu equipo sufre el acoso del rival durante noventa minutos, pero por una acción fortuita y en el contexto del siempre interpretable ‘Fair Play’, se pone en ventaja en los descuentos. ¿Te gustaría que permitieran el empate?.

Pues eso fue lo que ocurrió este fin de semana en Inglaterra, en el partido entre el Doncaster y el Bury por la League One, tercera categoría de ese fútbol. Luego de un dominio incesante del Bury (con un par de tiros en los postes incluidos), en el minuto 90+3′ la pelota es lanzada fuera del campo para que sea atendido el jugador de Doncaster, Nathan Cameron.

En la reposición, el atacante Harry Forrester lanzó la pelota hacia el arquero Christian Walton, pero el golero del Bury se vio sorprendido y el balón terminó ingresando. Gol del Doncaster y la polémica parecía instalarse en el estadio, mientras Forrester levantaba las manos en señal de disculpas.

Pero el entrenador del local Paul Dickov resolvió todo rápido y le pidió a sus jugadores que dejaran que el rival marcara de vuelta. Así las cosas, Leon Clark corrió desde mitad de cancha y, pese a la oposición en tono de broma de algunos rivales, marcó la igualdad a los 90+5′.

1-1 y el juez Eddie Ilderton poco después marcó el fin del juego, mientras el entrenador de Bury, David Flitcroft, no dudó en felicitar la actitud de su rival.

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