Las obras para convertir el eje Merced-Compañía en vía exclusiva para el transporte público ya están en marcha. La remodelación forma parte de la primera etapa del “Plan Centro” que está llevando a cabo el Ministerio de Transportes junto a la Municipalidad de Santiago, con el fin de mejorar la infraestructura urbana del centro histórico de la capital y facilitar el tránsito de peatones y ciclistas.

El convenio tiene como objetivo la transformación de siete arterias de Santiago en ejes exclusivos para la circulación del transporte público, entre las 07.00 y las 21.00 horas. Las obras se dividirán en cuatro etapas y se prolongarán por tres años. Entre las vías comprometidas -a parte del eje Compañía- Merced- también se verán implicadas las calles Santo Domingo, Bandera, Mac Iver, San Antonio, San Martín y Amunátegui.

Además, el plan conlleva el ensanchamiento de las veredas para facilitar el tránsito de los peatones así como la habilitación de nuevas ciclovías.

“Este plan busca hacerse cargo del centro de la capital, que es un lugar al cual vienen todos los días miles de personas, para que se corrija lo que ha sido la historia de la ultimas décadas en que la mayoría del espacio vial, la mayoría de los proyectos de inversión se han dedicado exclusivamente a los automóviles privados y en el centro de la capital las condiciones de desplazamiento del transporte publico, de los peatones y ni hablar de los ciclistas, eran extremadamente precarias” señaló la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá.

La jefa comunal apuntó que la ciudad debe hacer una apuesta por la dignidad para lograr mejores tiempos de viajes, mejores condiciones para el transporte público y facilitad para las bicicletas. “Son los medios más sostenibles, más económicos y los que generan una ciudad más amable y, desde el punto de vista ambiental son los que tienen menor impacto”. Además, Tohá especificó que el nuevo diseño del centro va a beneficiar al comercio.

En este sentido, el ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo reafirmó que el Plan Centro va fomentar el turismo y a potenciar el casco histórico como “un área de esparcimiento”.

“Queremos generar ciudades amigables, con alta calidad de vida, fomentar el transporte publico y disminuir la congestión” y que el caso histórico de Santiago sea “un ejemplo de una ciudad sustentable y atractiva para los chilenos”, enfatizó el secretario de Estado.