El 15° Juzgado de Garantía de Santiago ordenó la extensión por tres meses de la prisión preventiva que pesa sobre tres de los cuatro imputados por la detonación de un artefacto explosivo en el SubCentro de la estación Escuela Militar el 13 de julio de 2014.

A los acusados, adicionalmente, se les imputan otros hechos de similares características acaecidos entre julio y agosto del año anterior, en el marco de la investigación que dirige la Fiscalía Metropolitana Sur.

Se trata de Nataly Casanova Muñoz, de 26 años, Enrique Guzmán Amadeo y Juan Flores Riquelme, de 22 años, a quienes se les mantuvo la cautelar.

Por su parte al cuarto imputado, Guillermo Durán, se le levantó la cautelar de reclusión nocturna.

Según el fiscal Claudio Orellana, el objetivo de esta reformalización es precisar lo más claro posible los hechos por los que se llevaba la investigación, además de establecer la participación de los imputados y los delitos que el Ministerio Público podría llevar próximamente a juicio oral.

Agregó que, respecto a la indagatoria, se mantienen pendientes al menos 45 diligencias.

Los hechos que se imputan a los jóvenes son cuatro detonaciones de artefactos explosivos, y el hallazgo de pólvora en el domicilio de Flores y Casanova en septiembre de 2014. Respecto a la situación de Guillermo Durán, el persecutor señaló que él sigue investigando y que no ha sido sobreseído.

El abogado de la Defensoría Pública, Pedro Narvaez, quien representa a Guillermo Durán, tuvo una visión distinta y afirmó que el imputado, al no ser reformalizado, no puede estar sometido a la investigación ni mantener vigentes las cautelares dictadas por el tribunal en su momento.

Flores y Casanova son imputados por la colocación del artefacto que estalló en un vagón del Metro detenido en la estación Los Dominicos la noche del 13 de julio de 2014.

Además Flores y Enrique Guzmán tendrían responsabilidad en el ataque que el 11 de agosto afectó a la Primera Comisaría de Santiago y a la 39° Comisaría de Carabineros de El Bosque.

Casanova, Flores y Durán, adicionalmente fueron imputados por el porte de 680 gramos de pólvora negra descubierta en el domicilio en el que fueron aprehendidos, hecho que a juicio de la Fiscalía haría presumir que serían usados para la confección de artefactos explosivos.

En lo que respecta al ataque en el SubCentro de Las Condes, el hecho dejó 21 heridos, de los cuales 9 personas resultaron con lesiones graves y una de éstas presentó riesgo vital, lo que generó el cargo de homicidio frustrado en carácter de terrorista.