Con dos nuevos recursos de protección, algueras y pescadores de Coronel piden a la justicia que se prohíba a Endesa reanudar la operación de Bocamina 2. La denuncia apunta a la Superintendencia de Medio Ambiente, organismo al que se acusa de haber cedido a presiones indebidas, pasando por encima de la Corte Suprema.

Las acciones legales -de un grupo de 61 algueras y del Sindicato de Recolectores de Orilla y Pescadores Artesanales- fueron remitidas a Concepción desde la Corte de Apelaciones de Santiago, que se declaró incompetente para tramitarlas.

En ellas se denuncia a la Superintendencia del Medio Ambiente por aprobar medidas mitigatorias y dar luz verde a Endesa para poner en funcionamiento la termoeléctrica, apartándose de lo ordenado por la justicia, por ejemplo, en cuanto a la instalación de mallas para impedir la succión masiva de recursos marinos.

Esto, según Luis Morales, presidente del sindicato, podría calificarse como un desacato de la Superintendencia, y de allí que se pida en el recurso que se revoque el permiso para la generadora.

En igual línea va al recurso de los abogados asesores del senador Alejandro Navarro, quien estima que la autorización de la Superintendencia del Medio Ambiente es producto de presiones de Endesa.

Los recursos surgen a sólo días que Endesa deba cancelar la segunda cuota de 1,5 millones de pesos a 2 mil pescadores, en el marco del acuerdo reparatorio suscrito, aunque este pago está condicionado a la operación de Bocamina 2, admitió el pescador Luis Villablanca.

Consultado al respecto, el senador Navarro llamó a la generadora a pagar los dineros y no chantajear a los artesanales, que no son quienes presentaron el recurso de protección, dijo.

En estos momentos Endesa está en condiciones de poner en marcha la termoeléctrica, esperando sólo que el Centro de Despacho Económico lo solicite, de manera inyectar los 350 MW disponibles para el Sistema Interconectado Central.