Cerca de 30 personas damnificadas tras el incendio de Valparaíso de 2014 llegaron hasta las afueras de la Intendencia Regional para realizar una manifestación pacífica, donde colocaron dos carpas para pasar en ese lugar las noches mientras se mantienen a la espera de alguna solución a sus problemas habitacionales.

La dirigenta Lorena Monroy señaló que se están manifestando porque les dieron una solución parche, ya que hasta el 30 de diciembre tienen plazo para los subsidios de acogida y de arriendo.

Además, efectuó un llamado a la presidenta Bachelet para que se haga cargo de las promesas que hizo el Gobierno a quienes resultaron damnificados.

Al respecto, el intendente Ricardo Bravo indicó que el Gobierno se ha hecho cargo de cada uno de los damnificados, señalando que las demandas de este grupo de vecinos ya ha sido zanjada.

Bravo agregó que durante la fiscalización que la autoridad ha realizado se han encontrado con personas que se han aprovechado de mala forma de los beneficios entregados.

El jefe regional afirmó que de las 500 familias que han presentado su disconformidad, existen cerca de 250 que no han tomado ninguna opción de las que existen para salir de la situación de damnificados, informando que si esto no sucede a fines de agosto, el Gobierno no continuará pagándoles el subsidio de arriendo que hoy les entrega.

Las dirigentas que representan a los vecinos manifestaron su intención clara de quedarse en las afueras de la Intendencia Regional hasta que se les entregue una solución definitiva, agregando que muchos de los afectados a los que se les entregaron viviendas definitivas en comunas como Quilpué y Villa Alemana, hoy se quejan de que tienen serios problemas de habitabilidad, con filtraciones y una mala construcción.