Tras su aplaudida presentación en nuestro país, la compañía sueca impartió en tres jornadas, un curso sobre técnicas circenses a más de 40 artistas en el Centro de Artes Aéreas de La Reina. La agrupación, que trajo por primera vez a Latinoamérica su espectáculo Knitting Peace, conquistó a más de 6 mil espectadores con su puesta en escena que mezcló acrobacias, danza, música en vivo y mensaje social.
Encantaron a la prensa, a sus espectadores y por supuesto, a lo más de 40 artistas circenses que acudieron a su taller en el Centro de Artes Aéreas de La Reina. Se trata de la compañía sueca: Cirkus Cirkör que ofreció los días martes 14, miércoles 15 y jueves 17 de julio, un taller gratuito a artistas circenses, en el cual enseñaron parte de las técnicas que desarrollan para ejercer sus atractivas disciplinas. Trapecio, equilibrio, cuerda, banquín y mano a mano, fueron algunas de ellas.
El curso de nivel medio/avanzado en el que participaron más de 40 personas, entre ellas , alumnos de ciudades como Valparaíso, Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Chiloé, fue organizado por el Departamento de Educación y Comunidad de Fundación Teatro a Mil, contó con el apoyo del Área de Artes Circenses del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, y la colaboración del Centro de Artes Aéreas de La Reina.
Con un show intenso, reflexivo, inspirativo y sensorial, estos suecos con dos décadas de trayectoria en el circo contemporáneo, pisaron suelo chileno para presentar Knitting Peace. Espectáculo que dejó en lo más alto el nivel de esta categoría en su país, y que entre el pasado 1 y 12 de julio, deleitaron con su trabajo a más de 6 mil personas, durante sus 8 funciones, en el Teatro Municipal de Las Condes.
Por cerca de dos semanas en cartelera, la agrupación logró transmitir su mensaje de reflexión sobre la paz mundial. Tejiendo la paz (el nombre del espectáculo en español), fue un mensaje que poco a poco se fue instalando en el público y difundiéndose con fuerza en las redes sociales, sobre todo cuando ellos mismos se tomaron el subsuelo de Costanera Center para mostrar algunas de sus acrobacias el pasado viernes 3 de julio.
“Una de las grandes diferencias con los otros espectáculos circenses actuales es el concepto que mueve las rutinas y determina su materialidad: el tejido de la paz al que alude el título es plasmado a través de cuerdas, hilos de distintos grosores, madejas de lana que se transforman en muñequitos, pelotas de telas gigantes, lienzos y una copiosa estructura de textiles por la que los artistas trepan como arañas y se desplazan con admirable destreza (…) Knitting Peace es circo, pero sobre todo son 90 minutos de juego sostenido”, describió la crítica de Revista Qué Pasa, Alejandra Costamagna.
