La Corte Suprema confirmó el fallo contra el Servicio de Salud Bío Bío por la muerte de una paciente, a quien se le habría practicado un tratamiento equivocado en el Hospital de Los Ángeles. La familia de la mujer recibirá una millonaria indemnización.

En fallo unánime la Tercera Sala del máximo tribunal del país ratificó la sentencia que ordenó el pago de 30 millones de pesos al cónyuge e igual monto a cada uno de los tres hijos de María Regina Álvarez, quien murió el 26 de abril de 2011, en el hospital base de Los Ángeles, por una falla multisistémica.

La sentencia confirmó la falta de servicio del recinto asistencial en el tratamiento de la diabetes mielitus que afectaba a la paciente, cuadro que se complicó con la infección provocada por la bacteria escherichia coli, provocada por el descuido en la atención de la mujer, que a su vez le causó la muerte.