Uno de los siete dirigentes de la FIFA detenidos en Suiza a petición de las autoridades estadounidenses a finales de mayo, aceptó su extradición al país norteamericano, indicó el viernes el gobierno suizo, que espera que la policía estadounidense acuda a buscarlo.

“La fiscalia del distrito Este de Nueva York sospecha, sobre el que consintió ayer ser extraditado, que aceptó y guardó para él sobornos de varios millones de dólares de empresas comerciales deportivas, como intercambio por derechos de comercialización”, indicó la Oficina Federal Suiza de la Justicia (OFJ) en un comunicado.

“Ello afectó a eliminatorias para el Mundial, campeonatos regionales así como continentales en América del Norte y del Sur”, explicó la OFJ, subrayando que “las prácticas nutrieron financieramente a dos confederaciones continentales de la FIFA y a diferentes asociaciones nacionales”.

El detenido, que “pidió que su nombre no fuera revelado”, fue escuchado el jueves por las autoridades suizas.

Conforme a la ley penal internacional, la policía estadounidense dispone de diez días para ir en su busca a Suiza y llevarlo con él en la extradición.

En su primera declaración ante la policía cantonal de Zúrich, despues de su arresto el 27 de mayo, el responsable en cuestion se había opuesto a su extradición.

La OFJ había pedido a Estados Unidos que le enviara una petición formal de extradición, que fue remitida el 1 de julio.

Al ser preguntado por la AFP, un portavoz de la OFJ, Folco Galli, indicó que no sabía si los otros seis detenidos habían declarado.