Un nuevo reto tiene revolucionados a los asiduos a las redes sociales. Se trata del denominado “Don’t Judge Challenge” o “el reto de no juzgar”. Este desafío es la razón por la que cientos de jóvenes se han atrevido a filmarse con una apariencia totalmente distinta a la suya, comparándola a cómo son en la realidad.

La propuesta consiste en grabarse en vídeo con algunos problemas estéticos como el acné o exceso de vello facial para “afearse”. Tras compartir esa imagen, se muestran sin el disfraz aunque arreglados y maquillados.

Pero como todo buen reto, la iniciativa ha estado marcada por la polémica. Un gran número de cibernautas consideran que el nuevo desafío se basa en la burla e insulto contra las personas que padecen estos problemas, por lo que lejos de buscar la integración, se estaría perpetuando los estereotipos de la “fealdad”. Además explican que tener espinillas, usar lentes o tener labios no bien definidos, no significa que sean feos en lo absoluto.

En tanto, quienes han participado en la nueva tendencia, afirman que la finalidad es eliminar las críticas sobre el aspecto físico de las personas.

Aunque aún no se conoce de dónde viene este hashtag, se sabe que apareció paralelamente a la viralización del video la bloguera Em Ford, en el cual da a conocer el bullying que sufrió producto de su acné y alienta a sus seguidores a aceptarse en lugar de sentir vergüenza de sus problemas.

#BeautyInAllChallenge

Para responder al polémico reto, se comenzó un desafío llamado #BeautyInAllChallenge, en el cual se suben imágenes celebrando partes del cuerpo que otros critican, según señala el portal web de la revista Time.

Poco a poco, esta nueva etiqueta se ha ido viralizando y no sólo adolescentes y jóvenes se han unido, sino que también varios adultos.