El argentino que estaba en estado vegetativo desde hace 20 años falleció en un hospital de la provincia de Neuquén (sur), luego de que la Corte Suprema se apoyara en su caso para respaldar el derecho de las personas a una muerte digna, informaron este miércoles familiares.

Marcelo Diez estaba desahuciado desde octubre de 1994 cuando a los 30 años sufrió un accidente de tránsito y tras una presentación judicial de sus hermanas invocando su derecho a morir, su caso recibió el respaldo de la Corte Suprema, en un inédito fallo emitido el martes.

“La Corte Suprema confirma la importancia del derecho a la autodeterminación de toda persona con relación a su plan de vida, lo que incluye aceptar o rechazar un tratamiento médico”, explicó a la AFP Diego Morales, director del Área de Litigio y Defensa legal del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).

Diez murió el martes por la tarde, horas después del pronunciamiento de la Corte.

“Marcelo ya es libre, sobre todo de la perversión y la crueldad de aquellas personas e instituciones que violentaron su voluntad y lo cosificaron”, expresó su hermana Andrea al informar sobre el deceso en las redes sociales.

Apoyado en su caso la Corte reafirmó como válido que los familiares de un paciente desahuciado puedan solicitar su muerte digna invocando su voluntad, aunque aclaró que no se trata de eutanasia, aún ilegal en el país sudamericano.

“El cese de soporte vital no importa una práctica eutanásica vedada por la ley, sino que constituye una abstención terapéutica”, sostuvo.

El tribunal indicó que la familia puede “dar testimonio de la voluntad del paciente respecto de los tratamientos médicos que éste quiere o no recibir” para asegurar su derecho, contemplado por ley, de acceder a una muerte digna.

Con esta decisión “la Corte también analiza y confirma la constitucionalidad de leyes aprobadas en el año 2009 y en 2012 que reconocen el derecho de las personas a decidir sobre su cuerpo”, señaló Morales.

Argentina aprobó en mayo de 2012 la llamada Ley de Derechos del Paciente por la cual toda persona puede disponer mediante poder legal de órdenes anticipadas respecto al acceso a una muerte digna en caso de cuadros irreversibles.

Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Suiza, Gran Bretaña, Italia, Alemania, Noruega, Suecia, Hungría y República Checa figuran entre los países que permiten la muerte digna.

En España solo lo permiten tres provincias y en Uruguay rige desde 2013 una ley que contempla el rechazo a tratamientos médicos para prolongar la vida, similar a la vigente en Argentina.