El referéndum en Grecia provocaba debate este viernes en España: los aliados de Syriza ven en él una oportunidad “histórica” de cambiar Europa mientras la derecha en el poder teme un contagio que dañe la mejora económica antes de las legislativas.

La consulta griega toma especial relevancia en un país donde el gobernante Partido Popular (PP) teme ser expulsado del poder, en los comicios legislativos de finales de año, por una coalición de izquierdas liderada por el joven partido antiliberal Podemos que, como su aliado Syriza, denuncia las políticas de austeridad.

Los representantes de seis formaciones y plataformas de izquierdas expresaron este viernes en Madrid su apoyo a los partidarios del ‘no’, llamando a votar contra “el austericidio”.

Votar ‘no’ a las últimas condiciones presentadas a Grecia por sus acreedores “significa un rechazo a las políticas de austeridad y también un rechazo a todos los gobiernos que aplican esas políticas en el resto de los países de Europa”, declaró en rueda de prensa Rommy Arce, concejala de Ahora Madrid, plataforma ciudadana que gobierna la capital española desde mediados de junio.

“Somos solidarios con el pueblo griego, lo somos porque nosotros también hemos sufrido las políticas de la troika” (FMI, Banco Mundial y Banco Central Europeo), declaró Juantxo López de Uralde, portavoz del partido ecologista Equo y una de las figuras del movimiento de los ‘indignados’ que acampó en Madrid contra la austeridad y la corrupción en mayo de 2011.

“El ‘no’ en el referéndum griego no es un ‘no’ a Europa, no es un ‘no’ al euro, es un ‘sí’ a la democracia”, agregó.

“El dilema fundamental es entre democracia y austericidio”, subrayó por su parte Jaime Pastor, miembro de Podemos, partido de izquierda radical convertido en tercera fuerza política del país en un año y medio de existencia.

“Nuestro futuro dependerá de lo que pase en Grecia”, agregó antes de considerar que se presenta una “oportunidad histórica de luchar por otra Europa” más social.

Podemos no llamó abiertamente a votar ‘no’, pero uno de sus representantes estará en Atenas el domingo y el partido defendió el derecho de los griegos a decidir su futuro.

España reanudó el crecimiento en 2014 (+1,4%), pero su tasa de desempleo sigue siendo muy alta, 23,78%, justo por detrás de Grecia, cuya desocupación supera el 25% según los últimos datos disponibles.

De ahí el temor a un escenario similar si Podemos llega al poder impulsado por una población asfixiada por cuatro años de austeridad.

El viernes, el ministro de Economía, Luis de Guindos, no ocultó su posición. Si gana el ‘sí’, “será mucho más sencillo, mucho más fácil y mucho más viable”, declaró, agregando que el anuncio del referéndum -un “sinsentido” y un “error”- fue para los dirigentes europeos como “un jarro de agua fría”.

El jueves, el jefe del gobierno, Mariano Rajoy, también se había pronunciado indirectamente a favor del ‘sí’, denunciando de paso las “decisiones unilaterales y las políticas de hechos consumados” de Atenas.

Sin perder de vista las próximas legislativas, De Guindos aseguró que la economía española es sólida, pero advirtió a los partidarios de Podemos: “No tengo la más mínima duda que si en España se revierten las reformas (…) podemos tener una caída muy rápida del crecimiento económico”.

El debate llega también a la calle, con manifestaciones de apoyo al ‘no’ en Barcelona y Madrid viernes, sábado y domingo. En la capital catalana, unas 150 personas se reunieron frente a la oficina de la Unión Europa en la ciudad entonando gritos de “troika no, Grecia sí”.

“Creo que lo mejor para Grecia es votar ‘no’, pero al final lo importante es que decidan ellos y no la troika”, decía Pablo Martínez, un manifestante de 36 años.

Muestra del interés que suscita el referéndum, la radio privada Cadena Ser prevé realizar programas en directo desde Atenas el domingo por la noche y el lunes por la mañana.