El Tribunal de Apelaciones de Kabul anuló la pena de muerte dictada en primera instancia contra cuatro hombres culpables de haber matado a la joven Farjunda en marzo, falsamente acusada de haber quemado un Corán, informó este jueves un juez.

Una muchedumbre golpeó hasta la muerte a esta afgana de 27 años, acusándola de haber profanado el libro sagrado del islam. Después quemaron su cuerpo y lo tiraron a un río de Kabul.

Su calvario conmocionó a Afganistán y a otros países.

Los jueces del tribunal de primera instancia de “crímenes contra la seguridad nacional” condenaron en mayo por unanimidad a cuatro hombres a morir en la horca por este asesinato.

Pero en una audiencia celebrada discretamente esta semana, el tribunal de apelaciones decidió “reducir la pena a 20 años de prisión para tres de ellos y a 10 para el cuarto”, informó a la AFP Nasir Murid, presidente de la corte.

Contactado por la AFP, Mujibulá, hermano de Farjunda, reveló que la familia de la joven “no ha sido informada” de la decisión de la corte. “Y sea cual fuere la decisión de los jueces, no la aceptamos”, añadió.

Entre los cuatro condenados figura un mulá autoproclamado, Zainul Abidin, que vendía amuletos cerca de una mezquita y fue quien desató el linchamiento.

La investigación reveló que Farjunda nunca quemó el Corán, sino que denunció las actividades de este vendedor de amuletos, que no se ajustan al islam.