El Comité Nacional de Huelga de Hambre de los ex Prisioneros Políticos de Chile y Familiares, a través de un comunicado, informa que han reiniciado la huelga de hambre que partió el viernes pasado cuando se tomaron la sede del Partido Socialista.

Recordemos que los siete huelguistas fueron desalojados por Fuerzas Especiales de Carabineros desde la sede del PS, siendo detenidos en la 3ª comisaría de Santiago.

Esta vez, la Corporación de Promoción y Defensa de los Derechos del Pueblo (Codepu) aceptó mantenerlos en su sede mientras dure este movimiento, según confirmó el organismo a través de su página web.

“Como organismo defensor de los derechos humanos acoge a estas compañeras y compañeros, tal como hicimos con el grupo anterior de huelguistas”, señalaron.

En ese sentido, agrega que “esperamos que las autoridades encuentren una salida a este conflicto que se prolonga por demasiado tiempo y se generen los canales donde todos los sectores se sientan partícipes de la solución. Lamentamos que ex prisioneros, ancianos en su mayoría, arriesguen su vida buscando que se escuchen sus demandas de reparación integral”.

En tanto, el Comité Nacional de Huelga de Hambre de los ex Prisioneros Políticos de Chile, explica en su comunicado cuáles son sus principales demandas para reiniciar su huelga de hambre.

“Reiteramos que nuestras reivindicaciones principales son el aumento de la pensión Valech; la compatibilidad de ésta con la de exonerado político; una Ley de Indemnización; la calificación permanente de las víctimas de la dictadura cívico-militar y, establecer que la pensión de sobrevivencia acceda al cónyuge o conviviente por un monto igual al 100 % de la pensión y permitir la adhesión de los beneficiarios Prais a Fonasa, exentos de cotización”, exigen.

También explican que por unanimidad han decidido mantener esta huelga de hambre y le solicitan a la presidenta Michelle Bachelet, que los reciba en La Moneda, con el fin de dar solución en el corto plazo a este movimiento.

“Estamos conscientes del enorme daño físico y moral que implica para los compañeros y compañeras mantener esta huelga de hambre por más de 60 días, pero no estamos dispuestos a claudicar en esta lucha hasta lograr una verdadera y justa solución a nuestras demandas”, señalan.

Otra de las peticiones que demandan al Ejecutivo es obtener “una indemnización para los prisioneros torturados, una pensión y salud dignas para las víctimas de la dictadura de Pinochet que hoy día ya son ancianos”.